Acompañar al niño en las diferentes etapas de su
crecimiento y desarrollo hacia la autonomía personal, acompañando a familias y
educadores en los retos diarios.
Los niños necesitan padres y educadores activos que
les escuchen, les validen y les proporcionen claridad, seguridad y equilibrio.
Todos los niños, responden de manera favorable y
positiva a un trato respetuoso, sincero, firme y sin castigos, por tanto se
puede educar a un niño desde el cariño, el respeto, y la responsabilidad; sin
etiquetar, y sin herir.
Nuestros objetivos son: incrementar las relaciones
positivas con nuestros hijos, reducir nuestras respuestas negativas y las de
ellos, mejorando su cooperación y autoestima.
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