Está orientada a fomentar las competencias de los
padres y madres mediante la reflexión y el análisis de sus propias ideas sobre
el desarrollo y educación de sus hijos, siendo capaces de resolver dificultades
y conflictos.
Trabajamos la importancia que tiene la escucha
activa y empática, por eso, ponemos énfasis en la comunicación de doble sentido
y en el hecho de que en cada relación intervienen dos personas.
La clave: escuchar de forma distinta, estableciendo
rutas diferentes de comunicación.
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